¿Qué profesionales pueden usar calzado sanitario?
El calzado sanitario es ideal para cualquier profesional que pase largos períodos de pie o que trabaje en entornos donde la higiene y la seguridad sean cruciales. Esto incluye médicos, enfermeras, auxiliares de enfermería, personal de limpieza, farmacéuticos, técnicos de laboratorio y otros profesionales de la salud.
¿Puedo usar calzado sanitario fuera del ámbito laboral?
El calzado sanitario es tan cómodo y práctico que muchas personas lo utilizan fuera de su entorno de trabajo. Su diseño ergonómico y fácil de mantener lo hace adecuado para actividades cotidianas, especialmente si necesitas estar de pie durante mucho tiempo.
¿Cómo sé si el calzado sanitario que elijo es adecuado para mi?
Para elegir el calzado adecuado, debes tener en cuenta factores como el tipo de superficie donde trabajas (resbaladiza o dura), la cantidad de horas que estarás de pie y las necesidades de soporte y protección que requieras. Si tienes dudas, consulta nuestra guía de tallas y características, o contacta con nuestro equipo para recibir asesoramiento personalizado.
¿Cuándo llevar calzado sanitario cerrado?
Dependiendo de la actividad a realizar por el médico o profesional de la sanidad, se recomienda el uso de calzado cerrado.
Para las ambulancias, por ejemplo, es recomendable que el zapato o zapatilla sea cerrado. Esto permitirá al médico o enfermero tener la máxima movilidad, incluso cuando se trata de una urgencia y deben actuar rápido.
En salas de operaciones o cirugías, es recomendable utilizar zapato cerrado, mucho más manejable a la hora de colocar los cubrepiés desechables para evitar la propagación de virus o bacterias.
Del mismo modo, aquellos facultativos que pasan muchas horas de pie en su centro de trabajo deberán optar por calzado sanitario del tipo cerrado, preferiblemente zapatillas o deportivas ergonómicas. El pie está más sujeto y la pisada es más firme.